Crónicas Vampíricas (The Vampire Diaries)

La versión 2.0 vampírica nos ofrece una historia original acerca de los vampiros, especialmente gira entorno a Stefan (Paul Wesley) y Damon Salvatore (Ian Somerhalder) dos hermanos convertidos hacia 1864, por una vampira llamada Katherine (Nina Dobrev). Los hermanos vuelven al que fue su hogar, Mystic Falls (las Cataratas Místicas), y se encuentran con varias sorpresas.

Pero ¿qué puntos en común tienen con nosotros? en principio los vampiros son interesantes, porque vampirizan, es decir, en lugar de aportarnos algo para crecer, nos devoran, en cierto modo es reflejo de nosotros mismos; en lugar de aportar las cosas buenas que tenemos, utilizamos a las personas para conseguir nuestros fines egoístas.

Después de 146 años perdidos, dando tumbos, los Salvatore encuentran a alguien interesante. Nosotros, después de 20, 25, 30, 35, 40, 50 años en la tierra ¿creemos que podemos encontrar aún algo interesante? ¿podemos esperar algo nuevo?. Nunca el corazón humano muere, a pesar de la basura que le echamos encima, tarde o temprano el corazón se conmueve y deja de estar muerto, cuando ocurre esto, se abre un mundo nuevo. Esta nueva oportunidad se ve en Crónicas Vampíricas, cuando Stefan y Damon intentan establecer relaciones y volver a ser humanos.

Por encima de cierto despiste estético (todos los personajes que aparecen son jóvenes y atractivos ellos y ellas) y sentimental, los personajes apuestan por ser ellos mismos, saltando las dificultades.

Mientras, de fondo, las luchas entre humanos y vampiros, entre vampiros y otros seres, muestran la dualidad del mundo: por mucho que nos vaya bien en lo personal, siempre tenemos que estar en guardia en algún ámbito, ya sea profesional, político etc...

Sherlock

La última versión del detective más célebre de la historia, está ambientada en el Londres actual que cuenta las aventuras de Sherlock y Watson. Pero ¿qué podemos aprender de la serie? ¿qué tiene de original esta versión que no tenga las anteriores?.
 En cuanto a investigación subraya la prioridad de la observación; en efecto, Sherlock se muestra inquieto ante los indicios, intenta buscar la totalidad de los factores, antes de construir un argumento reflexivo. Para esto se apoya en Watson ya  que necesita una perspectiva científica para los datos científicos, que a Holmes se le escapan.

Muy interesante el lado filosófico, de cómo emerge la realidad ante la mirada de los observadores, es un misterio el que la realidad no la construimos, sino que se nos presenta si sabemos reconocerla, este es el trabajo de cualquier investigador.

Desde el lado humano, Holmes no pierde ni un minuto en tonterías ni en chorradas, en presentaciones formales estúpidas, o en comparativas del tamaño del ego, su prioridad absoluta es resolver el caso.
 Si todos tuviéramos esa actitud en nuestros respectivos trabajos, tal vez otros datos económicos manejaríamos hoy.
En conclusión, la serie salva al mito de Sherlock Holmes y Watson, con casos tan vertiginosos, que  supera a veces, a la versión original.

JAG, Alerta roja

La primera serie de éxito basada en el ejército y militares, con apoyo de la Fuerzas Armadas de Estados Unidos, debido a los valores que contagia la serie. JAG ha tenido un largo recorrido (1996-2005) basado en el cuerpo jurídico del ejército de USA, combinando la acción militar con la acción en otro escenario: los tribunales.

Para mi aporta algo esencial; muestra lo que realmente deberían ser los militares y los abogados, los militares deben defender a su país pero también defender la dignidad humana, por otro lado los abogados deberían buscar la justicia, y no defender a capa y espada cualquier cliente que page los honorarios (esta es precisamente la definición de mercenario).

En los protagonistas vemos algo interesante: algunos su vocación por la abogacía ha sido tardía y necesaria, ya que su primera vocación era ser piloto, pero al no poder ejercer debido a una ceguera, se transforma en un magnífico abogado. Este es el caso de Harmon Rabb, en el que es difícil separar su faceta militar (honor, lealtad, honestidad) de la de abogado (justicia) sería casi imposible concebir al abogado sin su pasado de militar. Creo que es el ejemplo que muestra que en la vida a veces llegamos a trabajos de rebote, pero luego en la acción descubrimos una nueva vocación para la que estamos preparados.

La serie, en lineas generales resulta interesante al afrontar conflictos desde distintas perspectivas: militar, civil, política y judicial. Además cuenta con la espectacular e inolvidable Catherine Bell, con una interpretación a la altura y adaptándose al mundo militar bastante bien, mostrando un carácter duro pero cercano en su faceta humana. Creo que es una serie que merece la pena.

Dexter

Esta serie invita a realizar un viaje introspectivo a nuestro lado más siniestro, si amigos, hacia esos momentos en los que no sentimos para bien o para mal, y simplemente nos guiamos por un código.
Esta experiencia la podemos compartir con Dexter el protagonista de esta serie, el psicópata sanguinario, incapaz de reprimir su sed de sangre, simplemente trata de reconducirla, matando a asesinos en serie, haciendo a veces el trabajo de un castigador. Los guionistas juegan con los telespectadores, haciendo de Dexter un policía, una ventaja para alguien que persigue a criminales.

A pesar de su trastorno, debe lealtad a su hermana y hacia alguna pareja sentimental, un acto de voluntad que le engrandece, ya que está por encima de sentimientos o apetencias, es voluntad pura. ¿Qué significa esto? ¿qué podemos aprender? bien, para empezar, querer a una persona no es un sentimiento, sino un acto de voluntad por encima del capricho de Eros y Afrodita, es valorar a la otra persona por lo que es, y en ese valorar nos conmovemos, bueno Dexter no.

El particular dilema moral, en el que se mueve la serie lo voy a afrontar; la pena de muerte, el perdón y la redención.
 Un asesino en serie que disfruta matando ¿tiene derecho al perdón? ¿puede rehabilitarse? ¿hasta qué punto es razonable creer en su redención y cambio? personalmente creo que estas cuestiones no se debaten a fondo, siempre se parte de un prejuicio: todo condenado tiene derecho a la reinserción. Yo no estoy de acuerdo en este a priori, ese don, a mi juicio el reo con las manos manchadas de sangre, se lo tiene que ganar. Pero ¿y en los casos que sea imposible la rehabilitación? ¿qué hacemos con estos depredadores? Esas preguntas las dejo que las respondan los lectores, hasta aquí puedo escribir, lo demás sería tensar más la cuerda.

Sensación de vivir (Beverly Hills 90210)

La serie acertó de pleno, con el enfoque de la vida desde la perspectiva adolescente de instituto. Muy original, ya que casi ninguna serie había afrontado los problemas a los que se enfrentan los chicos/as a estas edades, y fué inspiración a toda una constelación de series que se inspiraron en Sensación de vivir en Estados Unidos y en todo el mundo.

Para mi, el punto fuerte son las vivencias de los protagonistas en esta fase crucial de la vida: la elección del futuro profesional que da vértigo, los primeros amores, las equivocaciones y los aciertos, la incertidumbre, las evasiones en el alcohol o las drogas... Aparte de la inolvidable Shannen Doherty
El crepitar de la aventura de la vida adulta, el crecer tomando decisiones y dando pasos por un camino a veces lleno de dificultades y miedos, pero también lleno de esperanzas y sueños. La época del instituto, reverenciada por el cine la televisión a veces con revisiones poco originales, pero 90210: Sensación de vivir logra el clima de una era dorada en la existencia, con sus luces y sus sombras.

 Con todo para mi, a la serie le falta un punto, más profundidad; es cierto que en la adolescencia se adolece de cierta frivolidad, pero también es el momento existencial de las grandes miras: el sentido religioso, la amistad o la solidaridad no están a la altura en la serie. Un pero muy grande, que las sucesivas series de instituto han heredado sin aportar apenas nada original, salvo la evolución de la moda y la música.

 Espero que en el futuro alguna serie logre la intensidad de Sensación de vivir y consiga la profundidad adecuada a una época trascendental en la vida de todo ser humano, y no nos quedemos en el subidón o en el chute de hormonas propios de estas edades (como han hecho varias series españolas), sería un menosprecio a la persona, con influencias para el público juvenil que las visiona negativas, porque expresa una imagen del adolescente distorsionada y reducida.